En Chile existe una escasa cantidad de proyectos audiovisuales con temática en la violencia de género y, aún menos en lo que respecta a un cortometraje; además, los proyectos independientes nacionales no logran llegar a un público masivo por mucho tiempo. Teniendo un proyecto audiovisual con una temática poco atrayente al público chileno, se investiga sobre los nuevos modelos de distribución y difusión de hoy en día, abriendo así nuevas herramientas que permitan alcanzar a un público masivo.